quarta-feira, 24 de setembro de 2008

Batismo de Milagros em 2005

Bautizan a 'Niña Sirena'
AP Lima, Perú.- La llamada "niña sirena", Milagros Cerrón de nueve meses de edad, fue bautizada el martes bajo el rito católico, a escasas semanas de que sea sometida a una serie de intervenciones quirúrgicas para separar sus piernas unidas desde los muslos hasta el talón. La bebé tuvo como padrino al alcalde de Lima, Luis Castañeda Lossio, y a la enfermera Gladys Zúñiga, quien la cuida desde el día en que su padre la trajo a Lima buscando ayuda médica para tratar su extraña malformación. La niña nació con el síndrome de "sirenomelia" --que se presenta en uno de cada 70.000 nacimientos-- y por el cual sus piernas se encuentran unidas, aprisionadas dentro de un saco de piel hasta el talón, mientras los pies miran hacia afuera semejando una cola de pez. "Me siento alegre y contento porque un hombre como yo me he hecho responsable al tener un bebe en esta forma, porque hay muchos padres irresponsables que teniendo hijos sanos los dejan. Soy un ejemplo para el Perú y además internacional", dijo al finalizar el bautizo el padre de la niña, Ricardo Cerrón, de 24 años de edad. La ceremonia se realizó en la Parroquia del Sagrario, anexa a la Catedral y fue oficiada por el Obispo auxiliar de Lima, monseñor Carlos García, quien llamó en varias oportunidades a la bebé "la sirenita", como cariñosamente se la conoce en Perú. En brazos de su madre, y posteriormente de su madrina, la niña, vestida con ropa de gasa de color blanco, durmió apaciblemente durante toda la ceremonia. Sólo despertó y emitió un breve llanto al sentir el agua bautismal sobre su cabeza, para luego caer nuevamente dormida. "Es un gran honor ser el padrino de Milagritos", dijo el alcalde Castañeda. "Todos esperamos que los resultados (de la operación) sean óptimos, sean favorables, hasta la fecha todo así lo indica". Castañeda garantizó la ayuda financiera que viene proporcionando a la familia Cerrón la municipalidad de Lima, a través de sus Hospitales de la Solidaridad, en uno de los cuales será operada la bebé en marzo, según estiman los médicos. El apoyo del municipio de Lima "va a ser continuo, vamos a seguir, no la vamos a abandonar por doble motivo por ser alcalde, y como padrino", dijo Castañeda. La niña fue sometida, el 8 de febrero, a una primera intervención en la que se le colocaron entre las piernas bolsas de silicona para estirar su piel de manera de obtener suficiente tejido para cerrar las heridas que dejará la operación de separación de sus extremidades. El deseo de los padres de la niña era bautizarla antes de esa primera operación, que duró tres horas y media, "para que se sintiera más tranquila, para poder bautizarla sin ninguna preocupación". "Ahora que está con los expansores (de piel) se siente un poco más fastidiada", dijo Cerrón a la AP. Actualmente, la niña es sometida diariamente a entre una y dos sesiones dentro de una cámara hiperbárica --un aparato que proporciona mayores cantidades de oxígeno-- para favorecer la formación de nuevos vasos sanguíneos y el buen estado de los tejidos que soportarán la intervención para separar sus piernas. Los médicos han dicho que la bebé necesitará un seguimiento y tratamientos diversos durante 10 a 15 años con la esperanza de que pueda desarrollarse como una niña normal.

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